Este procedimiento quirúrgico, está destinado a la elevación, reformación y estiramiento de los tejidos del tercio inferior de la cara que por constitución o procesos de envejecimiento se encuentran abultados, laxos o descendidos.
Los resultados son completamente naturales y rejuvenecen a los pacientes.
Es prácticamente imposible cambiar el rostro de una persona haciéndola irreconocible mediante una cirugía plástica hecha éticamente por un especialista. La mayoría de los casos que todos conocemos de deformaciones del rostro NO SON cirugía plástica sino inyección de sustancias no aprobadas en el rostro.
Se entiende por tercio inferior de la cara como las regiones cervicales submandibular, submentoniana el borde mandibular completo, los mofletes o jowls, los surcos de marioneta y los surcos naso-labiales.
Cómo se realiza:
La cirugía se realiza a través de discretas incisiones en la patilla, dentro y alrededor de la oreja que coinciden con surcos naturales que todos tenemos. Se realiza una liberación de toda la piel del cuello y tercio inferior y medio de la cara, una disminución de la capa de grasa a nivel de la papada y de los jowls o mofletes, una corrección y resuspensión del músculo cervical mediante suturas, indispensable para que no se hagan bandas en el frente del cuello, resección de las glándulas sub-mandibular cuando están prominentes, y el estiramiento de las capas profundas del tercio medio inferior de la cara para mejorar los surcos naso-labial y de marioneta, los cuales también se pueden rellenar con tejido graso del mismo paciente.
Posteriormente, se acomoda la piel del cuello y la cara inferior a su nueva forma y posición, resecando el exceso de piel lateral y superiormente dentro de la misma incisión, que luego queda situada en sitios poco aparentes. Luego se protege la cirugía con un vendaje suave y acolchado.
Esta es una cirugía ambulatoria de dos horas de duración, que se realiza mejor con anestesia general.
En muchas partes se promete el mismo resultado con minilifting o estiramiento de la piel al rededor o detrás de las orejas, que lo único que produce son cicatrices ya que se tensiona la piel en esos sitios, y las cicatrices luego se ensanchan perdiendo todo resultado transitorio y además incompleto, porque no trabaja el frente del cuello ni suspende los tejidos musculares colgantes.
Otras veces se promete la elevación de los tejidos mediante hilos que dejan cicatrices en el rostro, resultados transitorios incompletos, con el agravante que los hilos son dificiles de retirar después.
Post Operatorio:
En el post operatorio se retirará el vendaje a las 24 o 48 horas de la cirugía y las suturas y grapas metálicas a los 7 o 14 días aproximadamente.
Se recomienda el uso de un vendaje semicompresivo o mentonera durante dos semanas de manera más continua posible, al menos 12 horas del día para proteger e inmovilizar los tejidos durante su fase inicial de cicatrización.
En algunos casos pueden aparecer equimosis que cederán espontáneamente, o pequeños hematomas que se puedan drenar sin dificultad ni molestias en el post-operatorio.
Es normal la disminución de la sensibilidad en la piel de la cara y el cuello las cual es transitoria, por tal motivo debe protegerse la piel de quemadura por un calor excesivo (secadores, Toallas muy calientes, etc.)
Esta cirugía se acompaña además de un proceso inflamatorio normal que será casi imperceptible al cabo de un mes, pero el completo proceso de cicatrización tomará unos meses más. Luego el resultado será duradero.
¡Disfrute su cirugía!!! CONSULTE SU CASO.
